Experimentar retraso psicomotor, también conocido como enlentecimiento psicomotor o deterioro psicomotor, se siente como si un dial se hubiera girado hacia atrás, lo que lo pone a velocidad lenta. Esto da como resultado movimientos corporales lentos o disminuidos, generalmente acompañados de una ralentización de los procesos de pensamiento.
Las manifestaciones físicas del deterioro psicomotor varían en alcance y gravedad, pero suelen ser obvias tanto para los seres queridos como para los profesionales de la salud.
¿Quién desarrolla el deterioro psicomotor?
El retraso psicomotor ocurre comúnmente durante los episodios depresivos del trastorno bipolar, así como durante el trastorno depresivo mayor. En estas circunstancias, los efectos suelen ser temporales y desaparecen a medida que desaparece la depresión.
Dicho esto, el desarrollo de retraso psicomotor no siempre indica un episodio depresivo. Otras situaciones y condiciones, como los efectos secundarios de los medicamentos y ciertas enfermedades médicas—también puede desencadenar una actividad física y mental reducida o más lenta.
Signos y síntomas del enlentecimiento psicomotor
Las personas con retraso psicomotor se mueven, hablan, reaccionan y, a menudo, piensan con más lentitud de lo normal. Esto puede manifestarse de varias maneras, dependiendo en gran medida de la gravedad de la discapacidad.
La capacidad de respuesta tardía y la dificultad para seguir la conversación de otra persona son comunes. Los procesos mentales complejos, como calcular una propina o trazar direcciones, tardan más en realizarse.
Los ejemplos comunes de manifestaciones físicas de deterioro psicomotor incluyen:
- Lentitud al caminar o cambiar de posición, como al levantarse de una silla
- Una capacidad disminuida para realizar tareas que requieren coordinación ojo-mano, como atrapar una pelota, afeitarse y maquillarse
- Reaccionar a las situaciones lentamentecomo cuando intenta alcanzar un objeto que cae
- Mostrando facilidad disminuida con tareas motoras finascomo escribir, usar tijeras y atarse los cordones de los zapatos
- Desplomarse al estar de pie y tener mala postura
- Hablando con una voz suave y monótona.
- Hablando notablemente más lentoo tener un discurso que está interrumpido por largas pausas o pérdida de trenes de pensamiento
- mirando al espacio y tener contacto visual reducido
Una persona con retraso psicomotor grave puede parecer catatónica. En este estado, la persona no responde normalmente a los demás ni al entorno. La catatonia representa una emergencia médica, ya que puede poner en peligro la vida.
Causas del Deterioro Psicomotor
La ralentización de la actividad mental y física ocurre con mayor frecuencia en personas que experimentan un episodio depresivo debido a una depresión mayor o un trastorno bipolar, posiblemente al alterar la materia blanca del cerebro.
El grado de embotamiento físico y mental a menudo se correlaciona con la gravedad del episodio depresivo. Otros trastornos psiquiátricos a veces asociados con el retraso psicomotor incluyen:
El deterioro psicomotor también está presente a veces con el abuso de sustancias. Las enfermedades del sistema nervioso y otras afecciones también pueden causar actividad física y mental disminuida o lenta, que incluyen:
Tratamiento del retraso psicomotor
Se pueden tomar varios pasos para ayudar a tratar el enlentecimiento psicomotor. Algunos implican la eliminación de causas externas, otros requieren el tratamiento de condiciones subyacentes.
Medicamento
Revisar los medicamentos actuales es uno de los primeros pasos para abordar el retraso psicomotor. Esto es importante para determinar si los efectos secundarios de los medicamentos podrían estar desencadenando la lentitud física y mental. Ciertos medicamentos contra la ansiedad y medicamentos antipsicóticos comúnmente recetados para el trastorno bipolar son posibles culpables.
Si los efectos secundarios de los medicamentos actuales no son la causa y se han descartado otras posibles causas, la prescripción de un nuevo medicamento suele ser la primera línea de defensa en el tratamiento del deterioro psicomotor asociado con un episodio depresivo.
Las opciones de medicamentos comunes para las personas con trastorno bipolar que experimentan un episodio depresivo incluyen Abilify (aripiprazol), Depakote (ácido valproico), Lamictal (lamotrigina), Latuda (lurasidona), litio, Seroquel (quetiapina) y Zyprexa (olanzapina), entre otros.
La elección del medicamento o combinación de medicamentos se realiza de forma individual. Los medicamentos actuales y pasados y la respuesta de un individuo a ellos son consideraciones importantes en las decisiones de tratamiento de drogas.
Otras opciones de tratamiento
Una vez que se encuentra la combinación correcta de medicamentos, se pueden usar psicoterapia y otras terapias no médicas además de los medicamentos para apoyar la estabilización del estado de ánimo a largo plazo.
Con depresión severa, especialmente si se acompaña de catatonia, pérdida de contacto con la realidad o alto riesgo de suicidio, la terapia electroconvulsiva (TEC) puede ser una opción. Si bien es una de las formas más rápidas y efectivas de tratar la depresión bipolar, la TEC generalmente se realiza solo si fallan otras opciones de tratamiento.