Perder a un cónyuge puede ser devastador, ya sea que la muerte sea repentina o después de una larga enfermedad. Un día estás casado; al día siguiente estás soltero, solo y afligido. Entre las emociones intensas, los cambios en el estilo de vida y las muchas consideraciones prácticas que acompañan la muerte de su cónyuge, probablemente se sienta abrumado y ansioso por su futuro.
Con el tiempo, es probable que el dolor disminuya y usted se construya una nueva vida. Mientras tanto, aquí hay algunos consejos para ayudarlo a sobrellevar la situación.
Sea fácil con usted mismo
No hay una forma correcta de sentirse después de perder a su cónyuge. Muchas variables contribuyen a su reacción, incluyendo qué tan largo y feliz fue su matrimonio, cómo murió su cónyuge, qué edad tienen sus hijos (si los tiene) y qué tan dependientes eran el uno del otro.
Puede sentirse entumecido, conmocionado, con el corazón roto o ansioso. Puede sentirse culpable por ser el que aún está vivo o sentirse aliviado de que su cónyuge ya no sufra. Incluso podrías sentirte enojado con tu cónyuge por dejarte. Puede llorar mucho, o puede que no. La forma en que te afliges es única para ti.
Esté preparado para los amigos y familiares que tal vez no sepan qué decir, que lo eviten o traten de consolarlo con clichés (como «él está en un lugar mejor»). A menudo, las personas bien intencionadas se sienten incómodas hablando de la muerte, pero eso no significa que no les importe.
Si puede, dígales a sus allegados lo que necesita (o lo que no necesita). Si las personas evitan mencionar a tu cónyuge, por ejemplo, y realmente quieres hablar sobre ellas, házselo saber. Tenga en cuenta que sus amigos y familiares también están de duelo y puede que les resulte reconfortante compartir recuerdos de su cónyuge.
Cuida tu salud física
El duelo puede afectar su cuerpo y sus emociones. Es posible que no tenga apetito o tenga problemas para dormir. Puede ser más fácil decirlo que hacerlo, pero trate de cuidarse comiendo bien, haciendo ejercicio y durmiendo lo suficiente. Trate de evitar ahogar sus penas bebiendo en exceso, ya que eso puede exacerbar su dolor.
Un estudio encontró que el riesgo de muerte para el cónyuge sobreviviente aumenta, particularmente en los primeros tres meses de duelo.Cuidar tu salud física en los meses posteriores a tu pérdida es fundamental.
Asegúrese de informarle a su proveedor de atención médica si tiene problemas para realizar las actividades diarias, como vestirse o prepararse la comida.
Busque apoyo
Lidiar con las secuelas de la pérdida a menudo es extremadamente solitario y confuso, y no es inusual sentirse deprimido. La pérdida de un cónyuge también se asocia con un riesgo elevado de aparición de diversos trastornos psiquiátricos.
Los estudios sugieren que la falta de apoyo social después de una pérdida inesperada es un indicador clave de la depresión.Por esta razón, es importante pedir ayuda a otras personas en su vida. Es posible que se sienta inclinado a volverse hacia adentro, pero probablemente le irá mejor si busca el apoyo de su familia, amigos, su comunidad religiosa (si tiene una) o un consejero.
Unirse a un grupo de apoyo con otras personas que están de duelo también puede ser muy reconfortante. Su proveedor de atención médica, terapeuta u hospital local generalmente pueden proporcionar información sobre cómo ubicar dichos grupos. Numerosos grupos de duelo también están disponibles en línea.
Ajusta tu vida social
Navegar por tu vida social como una persona soltera puede ser complicado. Si usted y su cónyuge socializaban con otras parejas regularmente, es posible que ahora no sepa cómo encajar. Es posible que se sienta incómodo yendo solo a fiestas y otros eventos. Dígales a sus amigos cómo se siente y explíqueles que es posible que deba evitar las cenas y reuniones de «parejas» por un tiempo y, en su lugar, ver a los amigos uno a uno.
Sin embargo, ser soltero también puede brindar una buena oportunidad para buscar nuevos amigos. Considere ofrecerse como voluntario o tomar una clase para motivarlo a salir de la casa y buscar algo significativo.
Busque ayuda para el duelo complicado
Perder a un cónyuge cambia la vida y el dolor profundo es una reacción normal. A veces, sin embargo, el dolor es tan profundo que interfiere con su capacidad para seguir adelante con su propia vida. Esto se conoce como «duelo complicado» y afecta aproximadamente al 7% de las personas en duelo. Los signos incluyen:
- Sentirse como si ya no tuviera un propósito
- Tener dificultad para realizar las actividades cotidianas.
- Experimentar sentimientos continuos de culpa o culparse a sí mismo por la muerte de su ser querido
- Deseando que hubieras muerto también
- Perder el deseo de socializar
Si no puede superar estos sentimientos, hable con su médico o un terapeuta, quienes pueden recomendarle opciones de tratamiento.
Una palabra de Psyathome
Es muy duro perder a un cónyuge. El duelo toma tiempo y es diferente para todos. Pero es posible crear una vida nueva y plena para usted sin dejar de apreciar los recuerdos de su relación y su ser querido.