Si tiene un trastorno de ansiedad social (SAD), es probable que participe en comportamientos que en realidad pueden dañar su tratamiento y empeorar aún más su ansiedad. Al tomar conciencia de estas acciones y trabajar para detenerlas, puede ayudarse a sí mismo a emprender el camino de la recuperación.
Deja de evitar
La evitación puede venir en muchas formas. Quizás bebes en las fiestas para pasar la noche. Tal vez lea los discursos palabra por palabra o evite el contacto visual cuando habla con la gente. Hay muchas formas de evasión, algunas de las cuales son tan sutiles que es posible que ni siquiera te des cuenta de lo que son. La evasión solo empeora la ansiedad a largo plazo porque nunca tienes que manejar realmente la situación en cuestión.
Deja de pensar negativamente
El pensamiento negativo está en la raíz de la ansiedad social. Algunos de los tratamientos más efectivos para el SAD, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) y la terapia de aceptación y compromiso (ACT) se basan en cambiar y trabajar a través de procesos de pensamiento negativos.Si no sabe por dónde empezar, considere llevar un diario de pensamientos para tener una mejor idea de la frecuencia con la que piensa negativamente.
Deja de posponer la obtención de ayuda
Si no le han diagnosticado trastorno de ansiedad social, es hora de buscar ayuda. Aunque será difícil dar ese primer paso, será uno que cambiará tu vida. Un buen lugar para comenzar es describiendo su situación a su médico de cabecera. Si siente que su ansiedad social le impide incluso hacer eso, escriba un historial de caso y presente el informe escrito en la cita.
Deja de pensar que no hay esperanza
Tal vez sienta que la medicación es demasiado riesgosa o que la terapia no funcionará. ¿Qué puedes perder? Existen tratamientos efectivos establecidos para el TAEy te lo debes a ti mismo para darles una oportunidad.
Deja de compararte con otros
Compararte con los demás solo te hace sentir bien cuando lo estás haciendo mejor que los demás. Siempre habrá alguien que sea más seguro, más hábil socialmente o que tenga un círculo más grande de amigos. En lugar de compararte con los demás, comienza a tratar de mejorarte a ti mismo. El criterio de su éxito es cómo le está yendo ahora en comparación con hace un año. No es como te comparas con los demás.
Deja de sentir que no puedes cambiar
Tal vez sientas que te repartieron una mala mano genética. Tal vez pienses que eres demasiado mayor para que te ayuden. Cualquiera que sea su razón para pensar que no puede cambiar, déjela descansar. Aprende a cambiar las cosas que puedes y acepta las que no puedes.
Puedes mejorar tus habilidades sociales con la práctica.Puede sentirse más cómodo en situaciones con una exposición adecuada. Siempre hay espacio para el cambio.
Deja de predecir el fracaso
Deja de pensar en lo que no quieres que suceda. En su lugar, empieza a pensar en lo que quieres que suceda. La manera más segura de asegurar el fracaso es esperarlo. Si tiene un próximo discurso, visualícese como un orador confiado. Si vas a una fiesta, imagina ser la mariposa social. Puede que no sucedan, pero al menos te has dado una oportunidad. Predecir el fracaso es una profecía autocumplida.
Deja de perder oportunidades
¿Ha dejado pasar un ascenso en el trabajo, abandonó una clase universitaria o simplemente no ha salido de casa en semanas? Si es así, está permitiendo que su ansiedad social genere oportunidades perdidas en su vida.
Es más probable que te arrepientas de las cosas que no hiciste o intentaste que de los errores que cometiste. Promete no dejar que la ansiedad social te impida obtener lo que quieres de la vida.
Deja de mantenerlo en secreto
Con la ansiedad social viene mucha vergüenza.Tu peor temor es que otras personas se den cuenta de lo ansioso que estás en situaciones sociales. ¿Por qué no empezar simplemente siendo honesto? No tienes que salir directamente y decirles a perfectos extraños que sufres de ansiedad social severa, pero puedes comenzar poco a poco y mencionar a las personas más cercanas a ti que ciertas situaciones te ponen ansioso. Con el tiempo, es posible que incluso se sienta lo suficientemente cómodo como para compartir toda su historia.
Deja de pensar que estás solo
Uno de los problemas de tener ansiedad social es que tiendes a pasar menos tiempo hablando con los demás y aprendiendo que ellos también tienen problemas.Puede parecer que todos los demás siempre tienen confianza en situaciones sociales, pero no es así. También hay muchas personas que luchan con los mismos problemas que tú. Visite los tableros de mensajes o lea las historias de ansiedad social de otras personas para reforzar el hecho de que no está solo.